Introducción
Es el perro nacional japonés. Al ser originario de la isla de Honsu, región nororiental de Akita, ha permanecido durante siglos aislado del resto del mundo, por lo que la raza ha mantenido intactas sus características primitivas que acentúan su antiguo origen. En el pasado los japoneses utilizaron el akita inu en la caza del jabalí, del ciervo y del oso pardo. En 1938 se fundó la sociedad para el incremento de las razas niponas (Nippon inu hosonkai), que se ocupa entre otras cosas de la tutela y promoción del akita inu respetando el estándar oficial. Sin embargo, hubo que esperar hasta la posguerra para ver esta raza también en América y después en Europa. De hecho, fueron los militares estadounidenses que ocuparon Japón al terminar la Segunda Guerra Mundial, quienes descubrieron las cualidades de este spitz asiático que fue posteriormente llevado a América y después dado a conocer en el resto del mundo.
Características
El akita inu es un perro sólido y potente, bien construido y proporcionado. La cabeza es grande con cráneo y frente anchos. El stop está bien definido, las mejillas están desarrolladas, el hocico es puntiagudo con caña nasal recta y corta. Los ojos son de color marrón oscuro, hundidos y bastante pequeños respecto a la mole total del akita inu. Las orejas son erguidas, pequeñas y siempre alerta. La cola es gruesa y llena y la lleva enrollada sobre el dorso cuando está trabajando. La altura a la cruz es de unos 67 cm en los machos, mientras que está en torno a 60 cm para las hembras. El peso oscila entre 35 y 40 kilos.
Carácter
Perro fuerte y resistente, muy valiente. Es muy cariñoso con los miembros de la familia.
Origen
Su origen proviene de Japón.